Dice que fue la razón por la que la población del país aumentó en un 50 por ciento, ayudando, a su vez, a que su economía se desarrollara y la hiciera tan próspera. La mitad de los australianos nacieron en el extranjero o tienen al menos un padre inmigrante. Esto ha dado a Australia una diversidad que le ayudará a construir una economía y una sociedad envidiadas por todos los demás países. El periódico afirma que siempre ha sido partidario de la inmigración, ya que ésta ha resultado notoriamente ventajosa, lo que ha sido corroborado por todos los estudios modernos sobre el tema. Esto se debe a que la inmigración intensifica la tasa de crecimiento económico al impulsar el consumo, el empleo y la demanda. Según el diario, también mejora su cultura y sociedad al crear un embriagador cóctel de prácticas, tradiciones y gustos. La inmigración apoya los valores humanos, ya que promueve la empatía y la tolerancia. Si hay problemas de infraestructura en el Land Down Under, la solución depende de invertir en su infraestructura. The Age no cree que la inmigración tenga nada que ver con esto. Incluso problemas como el tráfico y las mangueras se pueden resolver abordándolos. Estos son dolores que acompañan al crecimiento de cualquier tipo. Los cambios exponenciales en la tecnología, instigados por la creatividad y la innovación de los humanos, seguramente pueden resolver estos problemas. Por otro lado, recurrir a prácticas proteccionistas sólo socavaría a Australia cultural, económica y políticamente, concluye diciendo. Si está buscando migrar a Australia, hable con Y-Axis, la compañía de visas y inmigración número uno del mundo, para solicitar una visa relevante.